
Una noche inolvidable se vivió en el Teatro Lola Membrives, cuando Lionel Messi asistió de manera sorpresiva a una función de Rocky, la exitosa obra protagonizada por su amigo Nicolás Vázquez. La presencia del capitán de la Selección Argentina causó una verdadera revolución entre el público y el elenco.
Messi llegó acompañado por toda su familia: sus padres, Celia y Jorge; sus hermanos, Matías y Rodrigo; y varios de sus sobrinos. Su visita se mantuvo en secreto hasta el final de la función, cuando se puso de pie en medio de una ovación espontánea que llenó la sala de emoción.
El astro del fútbol, visiblemente conmovido, subió al escenario para dedicar unas breves palabras a su amigo, cumpliendo así con una promesa previa. El gesto fue especialmente significativo, ya que Nicolás Vázquez atraviesa un momento personal muy intenso.
La sala explotó en aplausos, y la presencia de Messi convirtió la velada en un recuerdo imborrable para todos los presentes.