Las bajas temperaturas de la temporada otoño/invierno pueden dar a entender que se necesitan consumir más calorías, cuando en realidad lo que se debe procurar es el hecho de que eso que se vaya a consumir cubra los nutrientes necesarios sin necesidad de que la ingesta calórica sea elevada.

“Llamamos a las frutas o verduras ‘de temporada o estación’ cuando la producción de éstas se desarrolla durante esa época o mes del año. Lo que nos sugiere varios beneficios, ya que el aporte en este caso, de las frutas y verdura otoño e invierno, además de brindarnos hidratación, tienen un bajo contenido en calorías y, algo muy importante, un alto contenido en vitamina C, un nutriente fundamental que ayuda a fortalecer la función inmunológica, para afrontar el cambio de estación que trae consigo gripes o alergias, entre otros

 ¿qué preparaciones se pueden realizar? 

Nutricionistas sugieren las milanesas de berenjena o calabaza al horno, buñuelos, tortillas, budín, soufflé o tartas de espinaca, zanahoria, hojas de remolacha al horno, ensaladas crudas o cocidas (con fideos, huevo, arroz, lentejas, garbanzos) pucheros y guisos con verduras, zapallitos o calabaza rellenas con arroz, arvejas, choclo, etc. En pastas rellenas (canelones, lasagna) como lasagna de berenjenas, verduras salteadas (cebolla, puerro, zapallitos), sopas, pures, en salsas, al vapor, a la parrilla o a la plancha